Gingivitis: Qué es, causas y prevención

La gingivitis es una fase temprana de la enfermedad periodontal muy común en todo el mundo. La Organización Mundial de la Salud estima que 1 de cada 4 adultos padece alguna forma de infección bacteriana, de los cuales entre un 15 y un 20% desarrolla la versión grave de la enfermedad, la periodontitis.

Causas de la gingivitis

Es por todos conocido que algunos hábitos como no cepillarse, no usar hilo dental o no enjuagarse, pueden causar la enfermedad periodontal o gingivitis, pero esta inflamación de las encías también tiene otras causas menos conocidas o incluso sorprendentes.

Las causas más comunes de la enfermedad periodontal son las siguientes:

1. La placa

La principal causa de la enfermedad periodontal o gingivitis es la placa, una gruesa película de bacterias que se forma sobre las encías y los dientes y que se puede eliminar con una rutina diaria de cepillado, hilo dental y enjuague. Hay millones de personas adultas que sufren la enfermedad periodontal en alguna de sus fases. Lo positivo es que la enfermedad periodontal se puede prevenir en su fase inicial, así que quizá sea el momento de adoptar nuevos hábitos saludables. Las revisiones dentales con una frecuencia mínima de seis meses también son fundamentales.

2. El tabaquismo

El tabaco interfiere en el funcionamiento normal de las células del tejido de las encías y deja la boca vulnerable a las infecciones, por eso también es una posible causa de la enfermedad periodontal.

3. Los cambios hormonales

Los altibajos hormonales como ocurren durante el embarazo, el ciclo menstrual, tratamientos hormonales, etc… pueden dejar las encías más vulnerables a la enfermedad periodontal. No es que el embarazo sea causa intrínseca de problemas de encías o dentales, pero sí que hay que prestar especial atención al cuidado de la boca durante este periodo para mantenerla sana. Un efecto inusual que suele producirse durante el embarazo es que las encías se irritan, inflaman, enrojecen y sangran levemente durante el cepillado o con el hilo dental, aunque estos síntomas suelen desaparecer después del embarazo.

4. Los medicamentos

Un efecto secundario de algunos medicamentos es reducir la producción y el flujo de la saliva, lo que deja una boca seca en la que las bacterias pueden proliferar rápidamente. Si te preocupa el estado de tus encías, consulta a tu médico si el tratamiento que estás tomando puede afectarles.

5. Las deficiencias nutricionales

Es importante tomar la cantidad diaria de vitaminas recomendada, ya que la deficiencia de vitamina C puede ser especialmente perjudicial para las encías. Una dieta rica en azúcares y carbohidratos y baja en agua y vitamina C puede llevar a tener problemas de encías.

6. Los dientes torcidos

Si tus dientes, como pasa con frecuencia, se superponen o bien están torcidos o girados, esto puede ser una causa de la enfermedad periodontal. Esto se debe a que una mala alineación de los dientes crea más espacios donde la placa puede acumularse y dañar tus dientes y encías. Nuestro consejo es que prestes especial atención a estas zonas cuando te cepilles y uses hilo dental. 

7. Los antecedentes familiares

Si tienes antecedentes de enfermedad periodontal en la familia, díselo al dentista, ya que esto puede plantear un riesgo ligeramente mayor de padecer una infección bacteriana.

Síntomas de la gingivitis 

  • Encías rojas o inflamadas: Si tus encías están rojizas o irritadas, puede que tengas gingivitis.
  • Encías que sangran: Aunque pase muy a menudo y parezca algo muy normal, lo cierto es que no es común ni saludable que las encías sangren durante el cepillado o  el uso del hilo. La permanencia de placa y sarro en los dientes hace que las encías se enrojezcan y se irriten más.
  • Mal aliento: El mal aliento es la consecuencia directa de la acumulación de placa en la lengua, lo que supondría que las bacterias no están siendo eliminadas correctamente y, por lo tanto, la higiene bucal no es la mejor.
  • Dolor y sensibilidad:  Los síntomas de la gingivitis podrían empeorar si no se tratan a tiempo, lo que podría dar lugar a la periodontitis. Algunos síntomas como dientes flojos o retracción de encías, podría significar una enfermedad de las encías más avanzada. 

Cómo prevenir la gingivitis 

  • Consultas con dentistas periódicamente: Visitar al dentista es muy importante para tu higiene bucodental. Se recomienda, por lo general, ir una vez cada 6 o 12 meses. Las radiografías periódicas también ayudan a identificar aquellas enfermedades que no se ven a simple vista. Una radiografía al año es recomendable para mantener una buena salud bucodental.
  • Prácticas saludables: Control de la alimentación, como el exceso de grasas o azúcar, también puede ayudar a mantener intacta la salud de nuestras encías.
  • Buena higiene bucal: Cepíllate los dientes dos minutos y al menos dos veces al día. Usar hilo dental es muy recomendable para llegar a aquellos recovecos a los que no llega el cepillo. Además, no te olvides de usar colutorio para llegar a aquellos lugares de la boca donde no puede limpiar el cepillo de dientes. Usar colutorio dos veces al día puede suponer un gran cambio en tu salud bucodental.  

¿Y la película viscosa que tengo en las encías al levantarme?

Se trata de una delgada película de bacterias, denominada "biopelícula dental", que puede adherirse a prácticamente cualquier superficie. Esa es la causa de que sintamos una especie de arenilla en las encías y los dientes al levantarnos por la mañana. Si no la eliminamos todos los días, se acumula y se convierte en placa dental.

Esta placa, a su vez, puede dar pie a la enfermedad periodontal y está compuesta por bacterias nocivas (del tipo que prolifera con el azúcar que queda en las encías y los dientes, y se convierte en ácido que los deteriora) y algunas bacterias buenas (de las que convierten la biopelícula normal en algo menos atractivo para las bacterias hambrientas de ácido).

Una persona que practique una rutina de higiene dental muy estricta y que se cepilla, usa hilo dental y se enjuaga todos los días, puede controlar y minimizar el tamaño de la biopelícula e incluso llegar a hacerla más saludable, aumentando la cantidad de bacterias buenas que contiene. Pero si nos limpiamos y enjuagamos las encías y los dientes con menos frecuencia, la biopelícula (generalmente de un color amarillo claro) puede endurecerse y convertirse en sarro, tan grueso que solo los dentistas pueden eliminarlo. No abandones tu rutina de enjuague si quieres que la biopelícula siga siendo un elemento saludable.