Encías inflamadas: Causas y remedios

Es importante cuidar las encías porque son una parte vulnerable de la boca y deben estar sanas. Sabemos que tenemos nuestras encías inflamadas cuando están más hinchadas de lo normal. La inflamación de las encías se puede distinguir a simple vista y suele ir acompañada de un enrojecimiento e irritación. Tener las encías inflamadas es un problema muy común en la ciudadanía española.

De hecho, la Sociedad Española de Periodoncia y Osteointegración (SEPA) declaró en un informe que tan solo el 14.8% de los adultos entre 35 y 44 años tiene las encías sanas.

¿Por qué es importante cuidar las encías?

La importancia de cuidar las encías reside en que son una parte vulnerable de la boca, por lo tanto, para evitar enfermedades periodontales y conseguir tener una buena salud bucodental, deben estar sanas.

Desde LISTERINE® queremos que mantengas una boca sana en todo momento, por eso queremos darte toda la información necesaria para que conozcas el estado en que se encuentran tus encías y puedas protegerlas de la inflamación.

Causas de las encías inflamadas

La inflamación de encías puede deberse a múltiples factores, pero algunas de las causas más frecuentes son las siguientes:

  • Gingivitis: La gingivitis se produce por depósitos de sarro que no se eliminan en la higiene diaria. Se suele manifestar con sangre durante el cepillado de los dientes. Esta es la primera fase de la periodontitis.
  • Periodontitis: Surge si la gingivitis no se trata. Esta enfermedad destruye progresivamente encías, huesos y tejidos de la boca.
  • Brackets o dentaduras: Estos aparatos pueden dificultar la higiene dental y por lo tanto podrían irritar las encías.
  • Déficit nutricional: La falta de vitamina C o hierro también pueden ser un factor para provocar inflamación de encías.
  • Medicamentos: El uso de determinados medicamentos puede provocar encías inflamadas como efecto secundario.

Remedios caseros para las encías inflamadas

Desde Listerine te proporcionamos una serie de consejos para evitar la inflamación de encías:

  • Bebe agua: El agua puede eliminar los depósitos de alimentos y bacterias.
  • Evita el consumo de alcohol y tabaco: El consumo de este tipo de sustancias puede dar lugar a encías irritadas.
  • Utiliza hilo dental: Usar hilo dental por lo menos una vez al día para mantener una higiene bucal adecuada. Este alcanza sitios donde el cepillo no puede llegar.    
  • Cepíllate los dientes después de cada comida: Es importante lavarse los dientes al menos durante dos minutos.
  • Alimentación equilibrada: Comer frutas y verduras, así como reducir la ingesta de alimentos y bebidas azucarados puede reducir el riesgo de tener encías inflamadas.
  • Uso de colutorio: El colutorio y los enjuagues bucales después del cepillado ayudan a completar tu limpieza bucodental y a prevenir posibles enfermedades de encías.

¿Por qué sangran las encías?

Con la edad el sangrado durante el cepillado se vuelve más frecuente. Es importante no restarle importancia a esta situación y consultar con un dentista. Es un síntoma -posiblemente acompañado de otras señales de alarma que solemos pasar por alto, como las encías hinchadas, enrojecidas o irritadas-, de la gingivitis, la fase inicial de la enfermedad periodontal.

Millones de adultos sufren alguna clase de enfermedad periodontal, aunque solo una parte muy pequeña se da cuenta, puesto que el dolor de encías no es un síntoma inicial. Lo positivo es que la fase inicial es prevenible si mejoras el cuidado bucal diario, sigues nuestros consejos y visitas con frecuencia al dentista para que este elimine la placa y el sarro mediante una limpieza.

Pero si no se trata, la sangre en el lavabo puede derivar en una enfermedad periodontal grave (periodontitis) que ataca a las encías, erosiona la mandíbula y es el principal motivo de la caída de los dientes. Si ves gotas de sangre, no esperes más para comenzar a mejorar tu rutina de cepillado, hilo dental y enjuague.

¿Por qué retroceden las encías?

Las encías retraídas son uno de los síntomas más evidentes de la enfermedad periodontal y se caracterizan por el hecho de que tus encías y el hueso se alejan del diente y dejan al descubierto una parte mayor de la parte inferior de este, dando lugar a una manifiesta recesión.

Este síntoma, también denominado retracción de las encías, deja la raíz del diente expuesta a las bacterias nocivas y la boca vulnerable a una inmensa variedad de problemas de salud. Si va acompañado de enrojecimiento e inflamación de las encías y estas sangran con el cepillado, es muy probable que se trate de la enfermedad periodontal en su fase inicial.

Es importante actuar con tiempo, ya que, si no las consecuencias pueden ser graves e irreversibles, como la pérdida de la dentina (tejido óseo, denso y duro que conforma la mayor parte del diente por debajo del esmalte y que mantiene el diente firmemente sujeto) y las raíces expuestas pueden ablandarse, doler o infectarse.

Posibles soluciones

Ahora bien, hay varias posibles soluciones al retroceso de encías como los injertos, que se llevan a cabo en casos donde el paciente necesita reparar daños y/o desea recuperar el buen aspecto de esa zona por una razón estética. Puede realizarse con fragmentos de la propia encía del paciente o con biomateriales sintéticos, que se integran perfectamente en su boca. Consulta con un profesional para un diagnóstico completo y la solución más adecuada.

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